lunes, 10 de mayo de 2010

Soy tu amigo.

Ven Señor Jesús,
te necesitamos.

Vengan ustedes.

Venimos hoy a ti Señor nuestro,
Rey de toda la creación,
Poderoso gigante de ejercitos de millones,
que están con nosotros.

Necesitamos de ti Señor, de tu poder,
de tus maravillas, de tus palabras,
pero sobre todo de tu amor.

Grande eres Señor en misericordia
y en toda bondad,
tu tienes el control y el dominio,
sobre nuestras circunstancias.

Colocamos en tus manos la vida y la salud de tus hijos,
así como la de sus generaciones;
nuestras familias dependen de tí.

Te damos gracias por todo lo que haces por nosotros,
pues hoy podemos alabarte y honrarte gracias a tus dádivas;
¡eres maravilloso oh Rey de gloria!

Necesitamos ser diferentes Señor,
transformanos en nuestro interior,
haznos morir a lo que somos,
vive tú, aquí en nuestros corazones.

Que no seamos nosotros, sino que seas tú,
Señor de nuestros dias, Señor Eterno.

Queremos escucharte Padre,
pues con tus palabras nos vivifícas,
nos haces crecer,
llenas de significado nuestras obras.

Ten paz.

Es lo que anhelo Señor.

¿Donde estas?

¿Dónde estás tú?

Aquí estoy Señor, buscándote.

¿Porqué me buscas?

Te busco porque te necesito Señor.

¿Estás seguro?

Si Señor.

¿Acaso ves otras cosas?

No temas.

Veo en ti un anhelo de que otros vean
ye te reconozcan.

¿Acaso no te soy suficiente?

Me eres suficiente Señor... perdóname.

No temas.

Yo te daré por pacto al pueblo, por luz de naciones
para que lleves buenas nuevas a los presos,
a aquellos que moran en tinieblas.

Esa es mi promesa.

Si Señor fiel, eso he creído.

No tienes que apresurarlo.
Sólo búscame.
Sólo búscame, otra vez te lo digo.

Señor, yo te busco.
Tu tienes cuidado de nosotros Jesús.

Ten paz.

Soy tu amigo.
No temas.

Padre, tengo tres peticiones:
Sana a Alejandro Señor, completamente;
Restaura la vida de mis amigos,
Cuida Señor a las que esperan.

Ten paz.

Gracias Señor, por éste momento.

Ten paz.

Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario