Establécete

Señor, Padre de toda bondad y amor,
ten misericordia de mí y de ésta humanidad que te necesita,
trae la paz a nuestros hogares, restáuranos.

Tu eres fiel en cumplir tu Palabra,
aquella que dice: Cree en Jesús y serás salvo,
tu y toda tu casa; yo lo creo.

Creo que mi familia está protegida hoy
bajo la sombra de tus alas,
que nada nos faltará, que estaremos seguros
pues tu nos proteges y nos libras.

Creo que la enfermedad será alejada
y no tendrá autoridad sobre mí
porque me has dicho que ninguna plaga
tocará mi morada.

Ten paz
yo estoy por ti;
no temas, estoy aquí.

Señor, tengo temores que me asedian,
no he sido perfecto en mi andar.

No temas.

Pero Señor, mis errores...

¿Cuales?

Tu los sabes Señor.

No temas, ven aquí hijo.

Voy a ti mi Señor.

Soy la roca, sobre mí se afirman tus pies,
afirma tu corazón tambien aquí.

Señor, ¿como permanezco?
¿cómo me asiento aquí?
quiero hacerlo.

Establécete.
Esta es tu morada, la tierra que he prometido.
Ven, habita aquí.

Si señor, gracias por estar conmigo;
por buscarme,
por llevarme a tí.

Ayúdame a asentarme, a establecerme.

Señor, sana a Alejandro, te lo pido.
No temas.

Amén.