Ayúdame a vencer

Me amas y eso es lo que he aprendido hasta hoy,
tengo la plena certeza de ello en los años de mi vida,
me diseñaste en tu pensamiento y me has pulido con las manos,
delicadamente me has dado forma, aun en las partes mas duras de mí mismo.

No he sido el mejor ni he sobresalido por mérito propio,
Nada de lo que tengo me pertenece, pero en vida
he sido privilegiado al hacerme conciente de tu grande amor.

Me has perdonado mis múltiples faltas
y me has puesto entre la espada y la pared
para tomar las decisiones mas importantes de mi vida,
pues me dejo seducir fácilmente por mi propia visión.

Ayúdame Señor a ser quien has dispuesto para mí,
pues ni aún mi vida está en mis manos.

Ayúdame a caminar de tu mano,
a hacer de mi búsqueda de tí un hábito verdadero
a sentir de tí la necesidad; ayúdame a alimentar mi alma con vigor.

Señor, tu eres el rey de mi vida;
Has vencido, en la lucha has ganado
me has libertado de las cadenas que me oprimían,
las has despedazado con un solo toque.

Ayúdame a mí ahora a vencer,
dáme la fuerza para batallar y ganar terreno para tí.
Ayúdame a mentenerme en pie,
que quienes nos persiguen huyan al saber que estás conmigo.

Rey poderoso y eterno aquí estoy buscándote,
delante de tí, como soy vengo a tí,
pues la verdad te necesito. Yo mismo no puedo avanzar, si tu no vas conmigo.
Dime cuales son tus caminos, oriéntame,
allá iré, hazmelo saber.
Te necesito otra vez.

Perdóname Señor, perdónanos a mi y a los míos...
tu nos has conocido en todos los tiempos y lugares,
nos has buscado y amado, como hombres y mujeres especiales para tí.
Aquí estoy dispuesto Señor...
Gracias.

Amén.